Ha llegado de la hora de la sociedad civil.

Luis Miguel 1eleccionesDías previos al 6 de Junio, fecha de la votación por la segunda vuelta para elegir al nuevo Presidente del Perú,  Luis Miguel Glave Testino, limeño -aunque cusqueño de corazón-, sociólogo, doctor en Historia por la Universidad Pablo de Olavide en España, estudioso del mundo andino, decidió transmitir una reflexión a sus seguidores y explicar por qué debía cerrársele el paso a Keiko Fujimori.

Adujo, entre otras razones,  que la situación en la que nos encontrábamos en ese momento electoral, no era nada fortuita. Ella se debía justamente  al modelo económico del régimen Fujimori, y a la conducta antidemocrática y obstruccionista con la que la  bancada de Fuerza Popular sumió al país en una seria crisis de gobierno y representación, y esto nada menos que en plena pandemia.

Así, las facciones más extremas del arcoíris político peruano se encontraron disputando la segunda vuelta electoral: Fuerza Popular y Perú Libre.  Éste último representado por un profesor de escuela que conquistó a millones de ciudadanos que se reconocieron en él, en su condición de hombre del Ande y de profesor de escuela rural, es decir en uno de los suyos, en uno que hablaba y decía las cosas como ellos. Esta reacción de los más pobres del país, era para Luis Miguel Glave una realidad que no podía ser desatendida. Por ello, y a pesar de reconocer con suma claridad los riegos implícitos en su opción, instó a quienes quisieran oírlo a apoyar a Pedro Castillo, para evitar que el país cayera en manos de quien lo destrozó: Keiko Fujimori.

Así las cosas, Pedro Castillo es ahora el Presidente del Perú, y no han pasado 15 días y ya hay rumores de vacancia. Con tres jaques en el tablero del  ajedrez político: pérdida de la mesa directiva del Congreso de la Republica; pérdida de las comisiones más importantes en el mismo; y la conformación de un gabinete cuestionado hasta por sus propios aliados, Castillo no la tiene nada fácil. Su talón de Aquiles: Vladimir Cerrón, de quien no termina de desmarcarse porque es dueño del Partido que lo llevó a la Presidencia. Debido a tal dependencia, ha colocado en el Premierato a un hombre de dudosa trayectoria, a quien el Congreso y la opinión pública han cuestionado de inmediato.

En esta situación, decidimos convocar a Luis Miguel Glave y pedirle, en tanto sociólogo e historiador, su análisis y opinión acerca del actual momento político del país. Escuchemos sus interesantes puntos de vista. 

"Quienes me preocupan son todos aquellos humildes hombres y mujeres que votaron por él" Ha llegado de la hora de la sociedad civil.

Días previos al 6 de Junio, fecha de la votación por la segunda vuelta para elegir al nuevo Presidente del Perú, Luis Miguel Glave Testino, limeño -aunque cusqueño de corazón-, sociólogo, doctor en Historia por la Universidad Pablo de Olavide en España, estudioso del mundo andino, decidió transmitir una reflexión a sus seguidores y explicar por qué debía cerrársele el paso a Keiko Fujimori. Adujo, entre otras razones, que la situación en la que nos encontrábamos en ese momento electoral, no era nada fortuita. Ella se debía justamente al modelo económico del régimen Fujimori, y a la conducta antidemocrática y obstruccionista con que la bancada de Fuerza Popular sumió al país en una seria crisis de gobierno y representación, y esto nada menos que en plena pandemia. Así, las facciones más extremas del arcoíris político peruano se encontraron disputando la segunda vuelta electoral: Fuerza Popular y Perú Libre. Éste último representado por un profesor de escuela que conquistó a millones de ciudadanos que se reconocieron en él, en su condición de hombre del Ande y de profesor de escuela rural, es decir en uno de los suyos, en uno que hablaba y decía las cosas como ellos. Esta reacción de los más pobres del país, era para Luis Miguel Glave una realidad que no podía ser desatendida. Por ello, y a pesar de reconocer con suma claridad los riegos implícitos en su opción, instó a quienes quisieran oírlo a apoyar a Pedro Castillo, para evitar que el país cayera en manos de quien lo destrozó: Keiko Fujimori. Así las cosas, Pedro Castillo es ahora el Presidente del Perú, y no han pasado 15 días y ya hay rumores de vacancia. Con tres jaques en el tablero del ajedrez político: pérdida de la mesa directiva del Congreso de la Republica; pérdida de las comisiones más importantes en el mismo; y la conformación de un gabinete cuestionado hasta por sus propios aliados, Castillo no la tiene nada fácil. Su talón de Aquiles: Vladimir Cerrón, de quien no termina de desmarcarse porque es dueño del Partido que lo llevó a la Presidencia. Debido a tal dependencia, ha colocado en el Premierato a un hombre de dudosa trayectoria, a quien el Congreso y la opinión pública han cuestionado de inmediato. En esta situación, decidimos convocar a Luis Miguel Glave y pedirle, en tanto sociólogo e historiador, su análisis y opinión acerca del actual momento político del país. Escuchemos sus interesantes puntos de vista.

Publicado por Valicha.com en Jueves, 12 de agosto de 2021